Convivir con la Alerta Roja

Dentro de tres días se cumple un mes desde que los habitantes de La Frontera, en la isla de El Hierro, tuvieron que ser evacuados ante la posibilidad de desprendimientos tras los más de 8.600 terremotos vividos desde julio. Apenas doce días después se producía el primer seísmo de gran magnitud, en concreto de 4’3º, que afecta sobre todo a la población de La Restinga, al sur de la isla. El 11 de octubre se produjo la primera erupción submarina y los vecinos de La Restinga fueron evacuados, el nivel de alerta se eleva a Rojo de nivel 1, con el que los vecinos de La Restinga y de otras partes de la isla llevan conviviendo desde entonces.

El fenómeno ha evolucionado durante el mes y, aunque el tremor es constante y hay cierta estabilidad, los temblores en el norte de la isla y los volcanes en el sur impiden el normal desarrollo de la vida en la isla.

Los desalojos continuaron de manera interrumpida, unas 650 personas están evacuadas de manera casi permanente de sus casas, 600 de ellas pertenecen a la pedanía de La Restinga, cuyos habitantes deben abandonar la población a las 18:00 cada día, pudiendo regresar a las 08:00 de la mañana siguiente.

Impacto económico

Pese a que los fenómenos naturales no han provocado, por sí mismos, ni daños personales ni materiales de gran coste, el impacto económico del peligro sísmico y volcánico es incalculable. Las principales fuentes de ingresos en el sur, pesca y buceo, se han visto paralizadas, mientras que los cortes y desalojos constantes en el norte han mermado las actividades económicas. Las autoridades nacionales y regionales abogan por una exención fiscal para los afectados o por la concesión de créditos ICO. Algunas instituciones financieras, como CajaSiete, han perdonado cuotas de hipotecas a sus clientes. La entidad declaraba en Facebook lo siguiente:

Paralelamente, en el norte de la isla, los empresarios de El Valle del Golfo y de El Pinar, con la colaboración del el Cabildo de El Hierro, han solicitado la suspensión y absolución de los pagos de la Seguridad Social, del IRPF, de los módulos empresariales y el IGIC mientras se mantenga el estado de alerta.

Cortes de carreteras

Las infraestructuras se han visto dañadas por la intensa actividad sísmica, lo que ha provocado que el túnel de Los Roquillos, que une Valverde, la capital de la isla, con El Golfo, la principal zona económica, haya sido cortado. El alcalde de La Frontera, David Cabrera de León, ha señalado que exigirá compensación económica ante los perjuicios sociales y económicos que se están produciendo. Además, se ha impedido el acceso a otras seis carreteras del norte y a las poblaciones de Tarocón y Puerto Naos, amén de La Restinga.

Esfuerzos por volver a la normalidad

Pese a los numerosos temblores y a las férreas medidas de seguridad, los ciudadanos de El Hierro se esfuerzan por volver a la normalidad. Así, tras un mes, el equipo de fútbol de La Restinga pudo volver a jugar un partido en su campo, tras un mes de entrenamientos fuera de la ciudad e incluso actividades suspendidas por la alerta sísmica.

Fotografías: Flikr Cabildo Insular de El Hierro