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viernes, 2 de diciembre de 2011

Vuelven a aparecer piroclastos frente a La Restinga

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El volcán vuelve a dar señales de vida al sur de El Hierro. De forma más tranquila que el 28 de noviembre, cuando también expulsara material magmático a la superficie, el burbujeo dejó en la mañana de ayer la huella visible de la actividad eruptiva. Los piroclastos expulsados fueron grandes rocas humeantes, que se hundieron antes de que el equipo de científicos apostado en La Restinga pudiera llegar al lugar donde se encuentra el foco volcánico.

Piroclasto recogido el 28 de Noviembre
Se llama piroclasto a cualquier expulsión de fragmentos sólidos en un foco eruptivo. Los de ayer salieron a la superficie en forma de grandes rocas, que tras su rápido hundimiento, apenas una hora y media duró el fenómeno, dejaron una estela marrón aún aún hoy visible frente a la costa herreña. Además de estos fragmentos la emisión de ayer fue acompañada de gases y ceniza en proporciones similares a las del 28 de noviembre.

Pese a encontrarse realizando su travesía habitual en la zona del foco eruptivo, el fuerte viento provocó que al equipo científico le fuera imposible llegar a recoger muestras. Como sí se logró el 28 de noviembre, tal y como se muestra en el vídeo a continuación.


Esta nueva expulsión piroclástica no ha venido acompañada sin embargo de un aumento significativo en la sismicidad, durante el día de ayer tan solo se localizaron 3 seísmos en la isla. Además la señal de tremor se ha mantenido constante durante toda la jornada, siendo de destacar que en los datos no aparece ninguna evidencia de una segunda fuente de tremor (Rechazando así la hipótesis vertida hace unas semanas de un segundo foco eruptivo).

En definitiva este nuevo acontecimiento en el foco eruptivo demuestra la dinámica de tranquilidad dominante durante los últimos días.  Los seísmos, que han bajado su intensidad y frecuencia de forma considerable han trasladado sus epicentros hacia el norte, esta madrugada se producían 4 seísmos, con epicentro en la costa de Frontera.

jueves, 1 de diciembre de 2011

Los precedentes volcánicos en Canarias

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Mientras el foco volcánico situado al sur de La Restinga continúa expulsando piroclastos y la posiblidad de que nazca un nuevo islote en la zona sigue siendo incierta, cabe hacer un repaso a las últimas situaciones similares ocurridas en las islas.

Erupción del volcán Teneguía
No hace falta retroceder demasiado en el tiempo para encontrar la última situación similar que se vivió en las islas. En el año 71, y a tan solo 100km al norte de donde hoy se vive la crisis volcánica, estallaba el Teneguía, en la isla de La Palma. El 26 de octubre de ese mismo año nacía a partir de la dorsal de la Cumbre Vieja un nuevo volcán, alarmando a los vecinos de Fuencaliente (La población más cercana) y convirtiendose, al igual que lo es El Hierro ahora, en el centro de interés de los vulcanólogos de todo el mundo.

Hablar del Teneguía es hablar del volcán más funesto de Canarias, pues es el único que provoco una victima mortal (un pescador que se acercó demasiado a la zona de emisión de gases). Sin embargo también supone hablar un hito turístico en la isla, ya que la erupción convirtió a La Palma en atractivo directo para muchos interesados en ver de cerca una erupción. La oferta de vuelos charter se amplió para cubrir la gran demanda que tuvo la isla durante el corto periodo de la erupción, que cesó el 28 de noviembre de ese mismo año.

Vino el Teneguía precedido del San Juan, que demuestra la gran intensidad volcánica de la vertiente más occidental del archipielago Canario. También en la Cumbre Vieja el Volcán San Juan entraba en erupción la noche del 24 de Junio de 1949 (noche que le da nombre), que contó con tres focos y provocó entre otros daños una lluvia de ceniza y azúfre sobre Los Llanos de Aridante (La 2º mayor población de la isla).

La naturaleza de las islas Canarias, nacidas, según las teorías más extendidas, por origen volcánico, ha provocado que la historia geológica del archipielago esté plagada de erupciones de este tipo, sin embargo, tan solo otra erupción se produjo en el siglo XX, la del Chinyero en Tenerife a principios de siglo. En el caso concreto de El Hierro habría que remontarse a 1793 para encontrar la última erupcion, la del Lomo Negro, en la zona de El Golfo.